El concepto de enfermedad mental es conocido también como trastorno psicológico, trastorno mental, trastorno psiquiátrico, trastorno emocional.
La enfermedad mental es un desbalance en la conducta, pensamientos, sentimientos, emociones que afectan directamente la vida de la persona que la padece.
En otras palabras, trastorno o enfermedad mental es un padecimiento que afecta nuestro cerebro, y podríamos decir nuestra mente, que se manifiesta con diferentes síntomas que alteran la conducta, pensamientos y emociones.
Si tomamos en cuenta que todas las personas tenemos cerebro, podemos afirmar que padecer un trastorno mental durante el curso de nuestra vida es algo muy común.
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¿Deseas aprender qué es enfermedad mental? Te interesa descubrir los síntomas y algunas pautas para saber si padeces algún tipo de afectación de la salud mental, y en su caso ¿Qué debes hacer? Aquí encontrarás toda la información necesaria para comprender y evitar ideas negativas o irracionales, estadísticas y datos importantes. Acompáñanos.
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De hecho, la Organización Mundial de la Salud, afirma que alrededor de 450 millones de personas a nivel mundial padecen algún tipo de enfermedad mental.
También, estima que, a nivel mundial, alrededor de 1 millón de personas se suicidan cada año.
Y confirma que, 4 de las 6 causas principales de discapacidad es consecuencia de enfermedades mentales, tales como depresión, esquizofrenia, trastorno bipolar, entre otros.
Por otro lado, estima que una de cada cuatro familias, tiene por lo menos un miembro afectado por un trastorno mental.
Estos datos demuestran que, la enfermedad mental es un padecimiento muy frecuente, y afecta de forma importante la productividad y el bienestar de las personas.
Una persona que padece una enfermedad mental experimenta cambios importantes en la forma en que piensa, actúa y siente.
Para muchas personas esto significa:
- Experimentar cambios de humor exagerados,
- Sentirse triste,
- Estar preocupado de forma excesiva,
- No pensar con claridad,
- Tener pensamientos extraños,
- Visiones,
- Incapacidad para comunicarse,
- Desear aislarse,
- Nerviosismo exagerado,
- Pensamientos negativos.
La enfermedad mental se desarrolla por factores sociales, psicológicos, biológicos y experiencias de vida que afectan de forma importante la salud de las personas.
Algunas experiencias que afectan y posibilitan el desarrollo de una enfermedad mental son:
• Estrés,
• Problemas de sueño,
• Violencia,
• Experiencias traumáticas,
• Soledad,
• Problemas de pareja,
• Desempleo,
• Economía.
Estos son solo algunos ejemplos de experiencias que pueden influir en el desarrollo de una enfermedad mental.
También, debemos aclarar, que no todas las personas que experimentan alguna vivencia como las que hemos mencionado desarrollan una enfermedad mental.
Es decir, no porque una persona experimenta problemas económicos o problemas en sus relaciones sociales, por ese simple hecho padece una enfermedad mental.
Para diagnosticar una enfermedad mental es necesario que:
• Los síntomas relacionados con la enfermedad mental ocasionen una afectación importante en la capacidad de la persona para cumplir con sus obligaciones.
• También, dichos síntomas generen una alteración importante en la conducta, sentimientos, pensamientos y emociones que impiden el desarrollo habitual de la persona.
La interacción de factores sociales, psicológicos y biológicos posibilitan o defienden a una persona del desarrollo de una enfermedad mental.
Padecer una enfermedad mental acarrea una enorme carga emocional y financiera para la persona que la padece y también para su familia.
Según la Organización Mundial de la Salud, existe una brecha importante entre la necesidad de atención y los recursos públicos disponibles.
De hecho, las cifras publicadas por este organismo afirman que, en los países en vías de desarrollo casi el 90% de las personas que padecen una enfermedad mental no reciben tratamiento.
Las enfermedades mentales están relacionadas con las enfermedades físicas.
Se ha demostrado que las enfermedades mentales, influyen en el desarrollo de padecimientos relacionados con el corazón, la presión arterial, migrañas, entre otras.
Muchas personas que padecen algún trastorno psicológico no saben que lo padecen, y su vida se desarrolla de forma caótica impidiendo que se desempeñen de una forma óptima.
Es necesario ver la salud mental de la misma forma que la salud física, es decir, salud y enfermedad mental debemos tratarlas de igual forma.
Todos estamos conscientes de que podemos experimentar una alteración en nuestra salud física debido a una gripa, malestar estomacal, dolores de cabeza, por mencionar algunos.
Algunas veces estas enfermedades nos impiden cumplir con nuestras actividades, ir a la escuela, al trabajo, salir al parque, estudiar, cocinar, etc.
De igual forma, un trastorno psicológico afecta la capacidad de una persona para llevar a cabo de forma óptima sus actividades, desarrollarse socialmente y experimentar emociones positivas.
Entonces, una persona puede darse cuenta de que ha desarrollado un trastorno psicológico si experimenta cambios en su vida que le impiden o afectan la forma en que se desarrolla de forma habitual.
Por ejemplo, hace unos días se encontraba bien y ahora:
- Ha perdido el interés en las actividades que disfrutaba anteriormente.
- Se encuentra irritable la mayor parte del día y todo le molesta.
- Levantarse de la cama parece una misión imposible.
- Se siente sin fuerza para hacer sus actividades.
- Tiene alteración de su ciclo del sueño.
- Experimenta problemas con la alimentación.
- No puede controlar sus emociones.
- Tiene pensamientos negativos que antes no tenía.
- No experimenta bienestar o satisfacción con su estilo de vida.
- Sus relaciones sociales son caóticas e inestables.
- No se puede concentrar.
- Toma decisiones que le ocasionan daño y problemas.
En otras palabras, experimenta cambios en su forma de sentir, pensar y actuar que afectan su vida.
Para cada persona es diferente y puede experimentar algunos síntomas en mayor o menor grado y también ser diferentes a los que hemos visto.
Pero en todas las personas que desarrollan un trastorno emocional, existe un factor en común que es un cambio en la conducta, pensamientos, sentimientos o emociones que dificultan su vida habitual.
Entonces, debemos tener en cuenta que un trastorno psicológico afecta nuestro bienestar, la forma en la que pensamos, nuestra conducta y la forma en que tomamos decisiones.
Las investigaciones demuestran que, el número de personas que padece una enfermedad mental incrementa cada día.
Estos datos resultan alarmantes, ya que implican que cada día incrementa el número de personas que sufren y pueden desarrollar algún tipo de discapacidad.
Ahora bien, analicemos.
Las enfermedades mentales afectan a 450 millones de personas a nivel mundial.
También, la Organización Mundial de la Salud afirma que el 90% de las personas que padecen alguna enfermedad de este tipo no reciben ayuda.
¿Qué puede hacer una persona que sospecha que padece una enfermedad mental o trastorno psiquiátrico?
La principal recomendación que podemos hacer es acudir con un profesional de la salud mental, ya sea psicólogo clínico o psiquiatra para que le ayuden a confirmar o descartar el trastorno.
Hablar con alguna persona de su total confianza también puede ayudarle para aclarar sus pensamientos.
Algunas veces, buscar información acerca de temas de salud mental, puede ayudarle a tener claridad acerca de lo que está pasando, otras veces resulta contraproducente debido al tipo de información consultada.
En cualquier caso, le animamos a seguir con la lectura de este artículo en el que buscamos aclarar todas estas dudas.
Entonces, veamos.
Tener conciencia o descubrir que se experimenta un trastorno psiquiátrico, es una experiencia que puede resultar abrumadora para cualquier persona.
Es aconsejable tomarse un tiempo para lidiar con sus pensamientos y sus sentimientos, los cuales se han presentado debido a la sospecha de padecer un trastorno emocional.
Es normal experimentar frustración, desánimo, miedo, estrés, nerviosismo, ansiedad y preocupación.
Pero, es importante poner manos a la obra para confirmar el padecimiento o descartarlo, no debemos negarlo, esconderlo o pretender que desaparecerá en unos días si no se le presta atención.
Esta conducta de negación conduce al incremento o gravedad de los síntomas, lo cual dificultará nuestro desarrollo vital.
Es importante llegados a este punto, tener claro que los trastornos mentales son comunes, y se pueden superar con un plan de tratamiento psicológico o en su caso farmacológico.
De hecho, las investigaciones han demostrado que, muchas personas con trastornos psicológicos graves consiguen mejorar su calidad de vida, y ser personas socialmente funcionales.
Pero es preciso, al igual que cuando se padece una enfermedad física, someterse a un tratamiento que nos ayude a superar con éxito los síntomas que nos aquejan.
Entonces, le podemos asegurar que su mejor decisión será acudir con un profesional de la salud mental, ya sea psicólogo clínico o médico psiquiatra, ambos le ayudarán en su diagnóstico.
Probablemente se pregunte:
Los datos de múltiples investigaciones científicas demuestran que los trastornos psiquiátricos se pueden superar por medio de psicoterapia.
¿Necesito acudir con un psicólogo clínico o un médico psiquiatra?
En este caso, podemos mencionarle las diferencias entre ambos profesionales.
Analicemos la función del médico psiquiatra.
Un médico psiquiatra, es un profesional médico que ha cursado una especialidad en psiquiatría, en donde ha recibido capacitación para diagnosticar trastornos mentales, y ofrecer tratamiento por medio de medicinas o fármacos.
Cuando una persona decide acudir al médico psiquiatra, debe considerar que recibirá tratamiento farmacológico, buscando mejorar los síntomas que afectan su calidad de vida.
También, es importante considerar que deberá acudir con frecuencia a citas médicas, por lo general semanales, en las cuales se valorará el funcionamiento del tratamiento y la mejora de los síntomas.
El tratamiento farmacológico, debe cumplirse siguiendo las indicaciones del médico, y no abandonarse o automedicarse evitando acudir a las citas médicas de seguimiento.
Es importante mencionar que, los fármacos utilizados por los psiquiatras son de uso delicado y ocasionan efectos secundarios, motivo por el cual es importante la vigilancia estricta de un médico psiquiatra.
Abandonar el tratamiento farmacológico de un día para otro, sin supervisión, puede ocasionar múltiples problemas físicos, emocionales y conductuales en el paciente.
De esta forma motivamos a las personas a considerar, por un lado, el compromiso con el cumplimiento del tratamiento farmacológico y, por otro lado, los costos asociados a este tratamiento.
En cuanto a los costos, es importante tener en cuenta el costo de las sesiones médicas, y el dinero destinado a la compra de medicamentos.
Analicemos la función del psicólogo clínico.
Por otro lado, un psicólogo clínico es un profesional del campo de la salud mental que ha estudiado una licenciatura en psicología, y por lo menos una maestría en el área de la salud mental.
Entonces, la formación del psicólogo clínico lo acredita como un experto para evaluar, tratar y diagnosticar enfermedades mentales.
Cuando una persona decide acudir a tratamiento con un psicólogo, debe considerar que este profesional no está capacitado para recetar ningún tipo de medicamento.
El tratamiento con un psicólogo consiste en acudir a una serie de sesiones, por lo regular de forma semanal, en donde mediante técnicas psicológicas se buscará mejorar los síntomas del paciente.
El tratamiento psicológico, además de acudir a las sesiones, requiere de compromiso para practicar las técnicas recomendadas por el psicólogo.
En este caso es recomendable considerar el costo que implica el tratamiento, que consiste básicamente en el pago de las sesiones de psicoterapia.
También, es necesario considerar que, se debe cumplir con el tratamiento y no abandonarlo por ningún motivo.
En muchas ocasiones las personas abandonan el tratamiento debido a que experimentan mejoría en su calidad de vida, pero es importante informar que esta mejoría no es permanente si no se cumple con el tratamiento.
De forma general estos son aspectos que diferencian la actividad del psicólogo clínico y el médico psiquiatra, dejando a juicio de cada persona evaluar la más conveniente.
Otra duda que se presenta con frecuencia entre las personas es:
¿Necesito un diagnóstico psicológico clínico? ¿Es necesario saber que enfermedad mental tengo?
Al respecto podemos comentar:
El nombre que se le da a cada enfermedad mental se da como resultado de la elaboración de un diagnóstico clínico.
El diagnóstico clínico consiste en aplicar una serie de técnicas y métodos psicológicos para evaluar los síntomas que experimenta cada persona.
Una vez evaluados los síntomas, es posible agruparlos relacionándolos con algún trastorno psicológico, puede ser, por ejemplo, depresión, ansiedad, trastorno bipolar, por mencionar algunos.
En la práctica clínica, muchos profesionales de la salud mental prefieren no emitir un diagnóstico clínico para evitar etiquetar a los pacientes con un padecimiento.
Nosotros, siguiendo las pautas de la terapia cognitivo conductual, consideramos importante elaborar un diagnóstico clínico y discutirlo con cada paciente.
Pensamos que, un paciente que cuenta con un diagnóstico clínico, y recibe la información correcta acerca de su padecimiento, puede obtener diferentes beneficios.
Por ejemplo, sabemos que:
- Puede conectarse con otras personas que experimentan el mismo trastorno.
- Sabe con precisión que tipo de padecimiento experimenta y se compromete con su tratamiento.
- Tiene la capacidad para decidir acerca de su tratamiento y su padecimiento.
En México, las leyes al respecto de la salud establecen la obligación de los profesionales de la salud mental de:
Elaborar un expediente clínico.
Establecer un diagnóstico clínico.
Entre otras obligaciones que es necesario cumplir.
Tomando en cuenta la legislación de nuestro país, el diagnóstico clínico no es una cuestión que debe quedar a consideración del profesional de la salud mental.
Elaborar un diagnóstico clínico es una obligación que debe cumplir un profesional de la salud mental.
Por otro lado, es frecuente tener dudas acerca de los factores que ocasionan una enfermedad mental.
Entonces, veamos:
¿Qué ocasiona una enfermedad mental?
Los trastornos psicológicos no tienen una sola causa, por el contrario, son producto de la interacción de múltiples factores que posibilitan su desarrollo.
Entre los factores de riesgo para los trastornos mentales o para el desarrollo de una enfermedad mental podemos encontrar:
- Biológicos. Se ha encontrado que muchas enfermedades mentales tienen origen en la genética, es decir, son hereditarias.
- Ambientales. Se ha demostrado que vivir en un entorno violento, estresante, pobreza, desempleo, incide en la salud mental.
- Traumas. Experimentar situaciones traumáticas durante la niñez o en cualquier momento del desarrollo de una persona es un factor de riesgo.
- Hábitos, Una vida que se caracteriza por hábitos poco saludables, desencadena factores que ponen en riesgo la salud mental.
- Excesos. Los excesos generan riesgo para la salud física y mental, abuso de drogas, alcohol, desvelarse, situaciones de estrés, etc.
En resumen, podemos decir que, los factores psicológicos, sociales y genéticos interactúan posibilitando la afectación de la salud mental.
Entonces, sabemos que, sin importar la edad o sexo de las personas, disminuir los factores de riesgo presentes en su estilo de vida disminuye la posibilidad de padecer un trastorno psiquiátrico.
Si tienes dudas, comentarios o sugerencias te invitamos a escribirlos en la sección de comentarios que se encuentra al final de esta página.
Algunas preguntas frecuentes.
¿Cuáles son las enfermedades mentales más comunes?
Las enfermedades mentales más comunes son los trastornos depresivos y los trastornos por ansiedad, los trastornos por abuso de sustancias.
¿Cuál es la enfermedad mental más peligrosa?
Todas las enfermedades mentales acarrean peligro para la persona que la padece, debido a la afectación que existe en su forma de pensar, conducta y proceso de toma de decisiones.
Es importante señalar que las personas que padecen una enfermedad mental, al contrario de lo que se cree comúnmente no son agresivas o peligrosas para las demás personas.
¿Qué es un trastorno mental según la OMS?
En general, establece la Organización Mundial de la Salud que el trastorno mental se caracteriza por una combinación de alteraciones del pensamiento, la percepción, las emociones, la conducta y las relaciones con los demás.